lunes, 19 de febrero de 2007

VIOLETA TK


Zachek Ringe tarabajaba en la oficina federal de investigación hasta que le dio aquel infarto en la calle Bouchardo. Nadie daba crédito a su circunstancia. Una salud de hierro minada por gracia de su fijación extraterrestre.Los venusinos le dijeron aquella noche de abducción:-"No andes jodiendo con lo nuestro", y desde una tarde roja desértica no pudo respirar de la misma forma. Antes de caer en Bouchardo, Ringe pensaba en aquellas seis tetas asimétricas, azules, colgando enamoradas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Uh... yo no sé si es por la hora o qué, pero no entendí mucho...

Me gustó (y entendí) hasta "... y desde una tarde roja desértica no pudo respirar de la misma forma..." pero lo de las tetas azules me mandaron al carajo.

Gracias por visitar mi blog che, un besito.